Santa Rosa de Lima (1586-1617) es una de las figuras religiosas más importantes de América Latina y la primera santa canonizada del continente. Nació como Isabel Flores de Oliva en Lima, Perú, en una familia humilde de ascendencia española. Desde muy joven, mostró una profunda devoción religiosa y un fuerte deseo de vivir en austeridad, dedicando su vida a la oración y la penitencia.
Adoptó el nombre de Rosa debido a su belleza, que según se cuenta, fue comparada con la de una rosa. Sin embargo, rechazó la atención y las propuestas matrimoniales, optando por consagrarse a Dios. Inspirada por Santa Catalina de Siena, Rosa se convirtió en terciaria dominica y vivió como laica en un pequeño ermitaño que construyó en el jardín de su casa.
Santa Rosa se destacó por su caridad hacia los pobres, enfermos e indígenas, a quienes atendía en su hogar. También practicaba severas penitencias, como el ayuno extremo y el uso de un cilicio. Su vida de sacrificio y oración la convirtió en un modelo de santidad para su tiempo.
Murió a los 31 años, el 24 de agosto de 1617, y fue canonizada por el Papa Clemente X en 1671, convirtiéndose en la patrona de Lima, Perú, América y Filipinas. Su fiesta se celebra el 30 de agosto, y su legado perdura como símbolo de devoción, humildad y servicio a los necesitados. Su casa en Lima, ahora un santuario, es un lugar de peregrinación popular.
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Mini Resumen: Santa Rosa de Lima (1586-1617), nacida en Lima como Isabel Flores de Oliva, fue la primera santa de América. Destacó por su vida de oración, penitencia y caridad hacia los pobres. Inspirada por Santa Catalina de Siena, vivió como laica dominica en austeridad. Murió a los 31 años y fue canonizada en 1671, siendo patrona de Lima, América y Filipinas. Su fiesta se celebra el 30 de agosto.
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0. Es muy interesante