La danza de los Mula Mula, también llamada de los arrieros o "Los Tucumanos", arrogantes y temperamentales que no agachan la cabeza y lidian pecho a pecho con su ocasional adversario
Atahualpa Yupanqui, declama sobre los tucumanos: "Es bandera de nieblas su poncho al viento/lo saludan las flautas del pajonal/ y guapeando en la senda por esos cerros/ el arriero va, el arriero va."
En la plaza de armas de Puno, a medio día, te espera una salteña con puntitos de limón. Exquisita empanada, testimonio de caminos recorridos desde Salta en el norte argentino. La salteña se quedó en Puno, como el canto dolido de los arrieros, para “entibiar los inviernos”.
La danza fue creada en alusión, a la presencia de los arrieros argentinos que viajaban cabalgando desde Tucumán arreando caballos y mulos para negociarlos. Se presentó esta danza originariamente en las provincias de Vilque, Azángaro, Carabaya y Sandia.
El ritmo de la música es vigoroso y pareciera imitar el trotar de los mulos, en ciertos momentos
Su coreografía pareciera imitar la acción de cabalgar, en determinados momentos danzan con pasos tan enérgicos que hace vibrar el piso cuando es de madera. Es danza solo de hombres, sin embargo lo hacen en parejas simulando una competencia de virilidad.
Su vestimenta consiste en: sombrero alón, camisa, dos reatas terciadas a ambos hombros, un mantón de manila como el que usan en la Pandilla Puneña, colgado de la cintura, un par de botas de cuero y espuelas "roncadoras" por el sonido al andar o danzar.
1 comentarios:
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0. Decía Atahualpa, "el hombre es paisaje que anda";cierto, más yo agregaría que en este andar, en esta eterna trashumancia, todos los paisajes convergen para que el "homo americano" emerja uno, diverso, hermanado...